La Cofradía de Grajal ratifica ante la juez su denuncia contra las monjas por el 'robo' de tallas

El secretario de la Orden Tercera de

San Antonio de Grajal (León), Julián

García, declaró ayer en el Juzgado

de Primera Instancia de Sahagún

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El secretario de la Orden Tercera de San Antonio de Grajal (León), Julián García, declaró ayer en el Juzgado de Primera Instancia de Sahagún para ratificar la denuncia que interpuso la hermandad por un supuesto delito de apropiación indebida contra las monjas Carmelitas Descalzas. En su declaración no sólo respaldó «punto por punto» lo que denunció ante la Guardia Civil de Sahagún hace unas semanas, sino que lo acompañó «con la correspondiente documentación que lo demuestra». La Cofradía denunció a las monjas de clausura, que residían en Grajal desde el siglo XIX y que se trasladaron a vivir hace medio año a Toledo, por un supuesto delito de apropiación indebida, al acusarlas de llevarse tres tallas de la iglesia La Antigua, situada junto al convento en el que residían. Se trata del Cristo Yacente, posiblemente del siglo XIV, además de La Inmaculada Concepción y San José con el Niño en Brazos, ambas del siglo XVII. «Estaba sólo yo citado a declarar, pero me acompañaron los de la junta de gobierno de la Cofradía y el alcalde, Francisco Espinosa», comentó García, quien indicó que, además de declarar, presentó en el juzgado cinco documentos, que demuestran que ellos son los propietarios de las tallas, según valoró. Además, entregó doce páginas, en las que se refleja «todo el proceso de Desamortización» tanto del convento, como de la iglesia, que está junto a él. En cuanto a los documentos, afirmó tener en su poder uno de 1728, que explica «la finalidad de la iglesia»; además de otro de 1803 que refleja la cesión del templo por parte de los Franciscanos a la Orden Tercera (es decir a la Cofradía) «para su uso».