EL PICARO
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Pícara, pícara, pícara. Pícara eres, seguro, y cada día más. Extrañado estoy, sin embargo, de que sobrevivas al yugo cruel que tu director general ha decidido imponer. Pícara mía hoy me entero, sorprendido, que tu buen amo pone el bozal a sus subordinados tal cual Torquemada. Pícara mía, que te admiro, ¿Sufres tu tal acoso? ¿Pícara bajo el yugo de la dictadura? No me lo creo. Hoy descubro, sorprendido, que tu ¿buen? amo veta este blog porque molesto le resulta. Le escuece la verdad más que la mentira. Quizá algún día, mi Pícara, libre serás. Hasta entonces sometida a Torquemada quedas. Gana terreno la dictadura... buenas noticias para los amantes de la libertad..
EL PICARO
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